El departamento compartido está dividido en cinco partes iguales, cada una propiedad de un dueño distinto. Cada fracción tiene un costo de $1,900,000 pesos. Para garantizar una distribución justa del uso del departamento, se asignan 6 semanas anuales a cada propietario mediante un sorteo equitativo. Además del costo de adquisición, los propietarios comparten el gasto de mantenimiento mensual, fijado en $8,000 pesos, lo que equivale a $1,000 pesos al mes por propietario.